La comunidad travesti-trans en Argentina, como en muchos lugares del mundo, ha enfrentado una larga historia de marginación, discriminación y lucha por la aceptación y los derechos humanos fundamentales. En un país con avances significativos en legislación y reconocimiento de identidades, la realidad cotidiana de las mujeres trans sigue siendo una batalla marcada por la exclusión social, la violencia y la falta de oportunidades equitativas.
En el vasto escenario del teatro argentino, emerge una obra como Lorena, un relato que entrelaza las experiencias vitales de mujeres trans, poniendo en primer plano las realidades con las que se encuentran en una sociedad que, a menudo, las estigmatiza y margina. Dentro del marco íntimo del ciclo El Hotel es un Cuerpo, este monólogo, escrito y dirigido por Felicitas Kamien y Federico Liss, se convierte en un espejo crudo pero necesario de las luchas diarias y los anhelos profundos de una comunidad que enfrenta obstáculos únicos en su camino hacia la aceptación y la dignidad.
El relato de Lorena, enmarcado por su encuentro con un odontólogo, es una ventana a las esperanzas y desilusiones de muchas mujeres trans. La promesa de un amor genuino y una vida convencional pareciera ser un oasis en un desierto de oportunidades negadas. Este hombre, que inicialmente se presenta como un catalizador de sueños, le brinda a Lorena algo que ha sido escaso en su vida: una oportunidad laboral en su consultorio, una visión de normalidad y la introducción a una faceta de la sociedad de la cual parecía estar excluida.
La relación que se desarrolla entre Lorena y la hija del odontólogo es una tierna construcción de afecto, una conexión que alimenta los anhelos de una vida plena y aceptada. La visión de una familia, el trabajo estable y el amor correspondido se convierten en los pilares de una existencia que, por primera vez, parece prometedora para Lorena.
Sin embargo, la ilusión se desvanece en un torbellino de abuso, violencia y desprecio. El hombre que prometió amor y estabilidad se convierte en el epítome de la traición y la crueldad. La vulnerabilidad de Lorena se expone brutalmente cuando la realidad rompe el sueño que se había construido, arrojándola nuevamente a las garras de una sociedad que no comprende ni acepta su identidad.
El arco narrativo de Lorena es un viaje doloroso pero esencial que refleja las luchas diarias de las mujeres trans en Argentina. La sociedad, con sus prejuicios arraigados, parece empeñada en relegarlas a la marginalidad, condenándolas a la prostitución y a la perenne discriminación. El monólogo revela, con una crudeza poética y un lenguaje descarnado, las cicatrices emocionales y físicas que estas mujeres llevan consigo, fruto de una realidad que las empuja a los márgenes.
La interpretación magistral de Payuca da vida a la complejidad de la protagonista, llevando al público a través de los altibajos emocionales de un personaje que encarna las luchas de una comunidad entera. La actuación es un acto de valentía, mostrando la vulnerabilidad, la fuerza y la lucha constante de Lorena por encontrar su lugar.
Más allá de ser una historia individual, Lorena se convierte en un alegato potente y necesario por la inclusión, la aceptación y el respeto hacia la diversidad de identidades.
En la plenitud del teatro, Lorena se erige como un monumento de resistencia, un testimonio de las fortalezas y fragilidades de una comunidad que, a pesar de los obstáculos, persiste en su búsqueda por la igualdad y el reconocimiento. Es una obra que trasciende el arte para convertirse en un acto de justicia social, un recordatorio apasionado de que la libertad, la identidad y el amor son derechos de todxs.
Ficha de la obra
Con Payuca
De Felicitas Kamien y Federico Liss
Dirigida por Felicitas Kamien
Diseño de iluminación Gonzalo Córdova
Diseño de vestuario Paola Andrea Delgado
Diseño de escenografía Rodrigo González Garillo
Producción TNC Anabella Iara Zarbo Colombo
Asistencia de dirección TNC Juan Doumecq