Es imposible hablar de tangos sin caer en el tema del amor. Ya lo decía Carlos Bahr: «Compás floreado de tango / que al apretarme en tus brazos, / me está encendiendo en los labios / una palabra de amor». Por esta razón, Silvia Copello y Jorge Capussotti crean Convocados, un espectáculo de cuentos, tangos, poemas y milongas, donde el amor es el protagonista.
Las narraciones y los poemas, la mayoría en boca de Silvia Copello, llevan al espectador a una noche atemporal en que los cuatro elementos que conforman el mundo y el amor, en tanto quinto elemento, confluyen en una nueva armonía, una nueva representación del cosmos. Si bien el amor aparenta fragilidad, es la fuerza más grande de todas y es el sentimiento que convoca a estos dos artistas. Se trata de una conversación cantada y recitada donde se manifiestan las distintas facetas de las relaciones humanas.
Existen momentos en que el desamor se presenta en un primer plano y, ante todo, el olvido es el mejor recurso: «Pero yo sé que metido / vivís penando un querer, / que querés hallar olvido / cambiando tanta mujer… / Yo sé que en las madrugadas, / cuando las farras dejás, / sentís tu pecho oprimido / por un recuerdo querido / y te pones a llorar». Existen otros en que se parece a una enfermedad incurable que puede llevar al poeta a la locura: «Estás clavada en mí… te siento en el latir / abrasador de mis sienes. / Te adoro cuando estás… y te amo mucho más / cuando estás lejos de mí. // Así te quiero dulce vida de mi vida. / Así te siento… solo mía… siempre mía». También los hay con un tono superado, pero que evidencia un apasionado enojo en el reclamo: «Algún día llorarás, / todo el daño que me hacés. / Te busqué sin darme paz, / por cariño, nada más / y ahora, no me conocés»; pero también los hay llenos de carcajadas, en una instancia más avanzada del desamor, cuando ya la situación se ha desbordado y no queda otra que reírse del asunto: «Me enamoré una vez, / no me enamoro más, / y a mí no me busqués / porque no me encontrás. / Me enamoré una vez / y no me andés atrás / porque por más que andés / a mí no me engañás».
Cariños, afectos, amores, todos se presentan, de alguna u otra manera, en los besos que damos, y quizá por esta razón, las historias narradas presentan besos personificados que se esconden entre recuerdos y las cosas que guardamos, esperando que alguien los encuentre y se los lleve puestos.
Las letras de los tangos, los microrrelatos, los poemas y el juego que proponen la expresiva voz de Jorge Capussotti y la dulzura de Silvia Copello son la excusa para que, convocados, los espectadores se dejen abrazar por las emociones y se detengan por un momento a contemplar el cosmos atravesado por el amor.
Ficha de la obra Actúan: Jorge Capussotti y Silvia Copello. Iluminación: Mariano Pozzi. Teatro: Teatro Del Pasillo – Colombres 35. Web: www.delpasilloteatro.com.ar Reservas : 11 49815167.
Esta reseña se publicó el 25 de noviembre de 2015 en La Cazuela