Si alguna vez existió el Big Bang, nada indica que, en algún momento, no exista otro que destruya, a partir de una partícula, todo lo que se creó, y que luego, ese final sea el comienzo de algo imprevisto.
La crisálida del fin del mundo, escrita por Federico Andahazi y dirigida por la talentosa Julia Muzio, trata sobre lo que quedó tras la implosión del universo. Escribaldo, en la piel de Javier Araya, es el único sobreviviente y, encerrado en una crisálida, dialoga con Dios, que le demanda historias como un niño que está por irse a dormir.
En este unipersonal, Escribaldo se mantiene en ese tiempo intermedio, sin espacio, sin devenir, in aeternum, narrando aventuras que cautivan a Dios y a los querubines que lo rodean. Delirante, surrealista, las palabras del protagonista describen un mundo imposible que llevan al espectador desde la risa a carcajadas hasta la reflexión más profunda.
El relato de tiempos anteriores a la implosión probablemente sea un homenaje a las primeras formas de la literatura, cuando los poetas componían la trama sobre los acontecimientos ocurridos en un pasado lejano, con el fin de preservar del olvido aquello que se narra, como testigo del Apocalipsis. Esta especie de Sherezade masculina, que busca postergar la condena del juicio final, teje y desteje recuerdos donde se mezcla lo sublime y lo mundano.
El trabajo actoral de Araya y la puesta de Muzio son un ensamble perfecto. La recreación de lo narrado se lleva a escena con precisión delicada y abierta al juego poético de una crisálida en la que la Literatura y la fe son lo único que tal vez trascienda después del fin del mundo.
Ficha de la obra Autoría: Federico Andahazi Actúan: Javier Araya Vestuario: Javier Araya, Aida Pippo Escenografía: Javier Araya, Pablo Cordero Jaure Diseño de luces: Javier Araya, Julia Muzio Realización de escenografía: Javier Araya, Pablo Cordero Jaure Música original: Daniel Iacovino Utilero: Javier Araya, Aida Pippo Asistencia técnica: Pablo Goldberg Asistencia de dirección: Jorge Costa Prensa: Tehagolaprensa Producción ejecutiva: Milena Lainez Puesta en escena: Julia Muzio Dirección: Julia Muzio BELISARIO CLUB DE CULTURA - Av. Corrientes 1624
Esta reseña se publicó el 24 de agosto de 2016 en La Cazuela