La poesía de Federico García Lorca tiene algo que a los argentinos nos conmueve hasta en lo más profundo. Su forma de ver el mundo es fascinante y, quizá, por cultura, nos resulta familiar.
El grupo Error de expediente, dirigido por Gabriela Marges, encontró en Lorca una excusa para compartir algo más que teatro y poesía. En La Luna anda descalza, presentan un modo de leer a Lorca en escena a través de la relación entre la palabra y los objetos de representación. Se trata de un recorrido onírico articulado con fragmentos de la obra de Lorca y estampas en sepia.
Marges desarrolló una suerte de feria, una verbena, como las que se armaban en los terrenos desolados en las afueras de los pueblos, en la que la rueda de la fortuna traza el camino de lo inexorable: un destino trágico para el poeta y la angustia de la soledad para quien sienta la pérdida.
En esta feria, los personajes confluyen en forma de remolinos y comparten su parlamento con el público: las mujeres —las de su casa, las costureras, las novias viudas—, los niños prodigio, los capitanes de ejércitos, los gitanos, los amores furtivos, todos se reúnen para dar vida y muerte al poeta granadino, al hombre que pintó, con sencillez y pasión, la esencia de lo español y de lo universal.
Ficha de la obra Sobre textos de: Federico García Lorca Libro: Gabriela Marges Actúan: Andrea Basualdo, Nora Candal, Juan Cappuccio, Ricardo Cardone, Martha Estévez, Marian Laterza, Yesenia Martinez, Marcela Morales, Alicia Novello, Azucena Paradiso, Aldo Perez, Laura Ríos Manipuladores: Juan Cappuccio, Laura Ríos Escenografía: Esteban Fernández Realización de títeres: Esteban Fernández, Pasha Kyslychko Edición de video: Esteban Fernández Proyecciones: Esteban Fernández Operación técnica: Julio Bissio, Esteban Fernández, Miguel Ángel Sinopoli Asistencia de dirección: Susana Gil Dirección: Gabriela Marges TEATRO PAN Y ARTE – Boedo 876
Esta reseña se publicó el 10 de abril de 2016 en La Cazuela