Todo proceso de aprendizaje implica una crisis, y tal vez, por esa razón, las personas asumen siempre que la educación y la enseñanza atraviesan un constante período de decadencia.
Un charco inútil, del dramaturgo español David Desola, con dirección de Matías Puricelli, narra la historia de un profesor que ha vivido una situación traumática tras ser agredido en la escuela por un alumno a causa de un conflicto en torno a un paquete de cigarrillos. Por esta razón, decide cambiar de entorno y acceder al mundo de las clases particulares.
Un alumno se convierte en su nuevo desafío como maestro, y mientras avanza la trama, desarrolla un vínculo muy especial con la madre del estudiante. La vida puertas adentro, los refugios personales, el mundo de lo privado son los espacios donde, mediante el encuentro y el compartir, se abren reflexiones sobre el amor, la soledad, la pérdida, los miedos y la locura.
Un charco inútil expone las particularidades del aprendizaje experiencial, el modo en que aprendemos a sobrellevar las angustias y lo que nos duele. Es un drama sobre los recursos que la humanidad cuenta como vías de escape ante una existencia insoportable.
Ficha de la obra
Autor: David Desola Intérpretes: Gustavo Bonfigli, Manuel Feito, Marisa Provenzano Diseño de Escenografía: Darío Feal Realización Escenográfica: Horacio del Marmol Realización telón: TXD Internacional Música: Fran Ruiz Barlet Diseño de Luces: Caio Senicato Vestuario: Andrea Saldivia Diseño: Wilfredo Parra Fotos de Gráfica: Gabriel Oscar Pérez Asistente de Dirección: Gonzalo Cabalcabué Asistente de Producción: Matías Mulet Asistente de Escenografía: Florencia Gualdoni Producción General: MarMan Producciones Independientes Dirección: Matías Puricelli
Esta reseña se publicó el 28 de julio de 2016 en La Cazuela