Las pérdidas a veces traen algún tipo de ganancias. Cuando muere un ser querido, existe la oportunidad para reencontrarse con aquellos que se han distanciado o con quienes se han cortado lazos.
Separarse de uno mismo, escrita por Fernando Salvucci y dirigida por Susana Mosciaro, es la historia de dos hermanos, Julio y Oscar. Tras dos años de separación, se reúnen en la casa de sus padres, recientemente fallecidos.
Julio es un hombre signado por el éxito: planea casarse con su pareja, Carolina, tiene un trabajo bien pago, tiene todo lo que pudiera desear, al menos, en apariencia.
Oscar es un hombre con una gran vida interior, pero no tiene nada más que su deseo, sus recuerdos y sus pensamientos. No tiene trabajo, no encontró el amor, no tiene posesiones y vive en su casa natal.
La historia se desenvuelve entre la necesidad de preservar lo que sus padres construyeron y la urgencia de liberarse de todo para convertir las raíces en dinero o algo más rentable.
Es interesante el intercambio que se produce en escena porque los tres personajes, Carolina, Julio y Oscar, se despliegan en la medida en que avanza la historia hasta llegar a lo más íntimo de cada existencia y, en la tensión del desacuerdo, deberán asumir que el único camino viable implica separarse de uno mismo.
Ficha de la obra
Dramaturgia: Fernando Salvucci
Actúan: Luján Marangos, Lucas Martinez Foresi, Leandro Sandonato
Vestuario: Assunta Olivieri
Iluminación: Joel Saunier Rébori
Diseño de luces: Susana Mosciaro
Asistencia de Sala: Gustavo Paulela
Asistencia de dirección: Dario Ziskevich
Prensa: Kasspress, Laura Mathieu
Producción: Ying-yang
Dirección general: Susana Mosciaro
BRILLA CORDELIA - Juan D. Perón 1926