Ya lo dijo Anton Chéjov: «La felicidad no existe. Lo único que existe es el deseo de ser feliz». Entonces, ¿algún estado en el que el deseo de ser feliz se realice, aunque sea por un momento?
No dejes nunca de mirarme por favor, escrita y dirigida por Bernardo Cappa, surge como una especie de reescritura de La gaviota, de Chéjov. Una actriz consagrada (Celina Font) descubre que su pareja, un famoso escritor (Pablo Caramelo), ha tenido un affair con una actriz más joven (Maia Lancioni) y se han filmado teniendo relaciones.
La historia se centra en los dramas personales de los personajes que se entretejen en una trama desesperada por la aprobación del otro, sobre todo, en el caso del hijo de la actriz consagrada (Aníbal Gulluni), quien busca en vano ser amado tanto por su madre como por la mujer más joven.
No dejes nunca de mirarme por favor propone una visión moderna sobre un dilema clásico: la lucha constante de ser para los otros cuando se ignora cómo ser para uno mismo. Ese mismo dilema es el que llevaba a los personajes chejovianos a vivir en una eterna angustia sin salida, y aquí, reelabora en una comedia sobre lo absurdo del padecer que creemos merecido.
Ficha de la obra
Autoría: Bernardo Cappa
Actúan: Pablo Caramelo, Celina Font, Aníbal Gulluni, Maia Lancioni
Diseño de vestuario: Pia Drugueri
Diseño de escenografía: Pia Drugueri
Diseño de luces: Ricardo Sica
Fotografía: Natalia Pinilla
Asistencia de dirección: Agustina Dalmaso
Prensa: Carolina Alfonso
Colaboración en dramaturgia: Pedro Sedlinsky
Dirección: Bernardo Cappa
EL CAMARÍN DE LAS MUSAS - Mario Bravo 960